Entrevista a Inmaculada Salomón, "First Dancer" del Ballet Nacional de España
Bailar es arte, es deporte, es emoción, expresión... Un trabajo que requiere poder, concentración y disciplina. En España tenemos grandes referentes de este arte y si queríamos hablar de bailar, teníamos que encontrarnos con ella.
Inma Salomón es la primera bailarina o “First Dancer” del Ballet Nacional de España. Un título solo reservado para unas pocas y en la que se resalta la excelencia, el talento y la pasión.
Inma Salomón bailando zorongo, un baile popular propio de la música andaluza
P.- ¿Cómo es recibir ese título?¿Qué implica personal y profesionalmente?
R.- Para mí fue una recompensa a todo el trabajo realizado, es como un sueño llegar a alcanzar este puesto. Este título implica mucha responsabilidad y estar muy centrada, en muchas ocasiones sientes mucha presión y tienes que estar fuerte. A nivel personal ha sido un descubrimiento, estar en este puesto me ha llevado a tener que hacer un gran trabajo de autoconocimiento y desarrollo personal que me ha abierto la puerta a otras inquietudes más profundas.
Tienes una larga trayectoria profesional a tus espaldas. Nos encantaría que nos contaras cómo fueron tus inicios y cómo te introdujiste al mundo de la danza.
Mi primer contacto con la danza fue en el colegio, en las extraescolares. La maestra llamó a mi madre para decirle que tenía buenas condiciones para dedicarme profesionalmente a ello y que me presentara al conservatorio. Así lo hizo mi madre y con 8 años aprobé el acceso al Real Conservatorio de Danza Mariemma, en el que estudié durante los siguientes 10 años.
"De pequeña me encantaba imitar a cantantes y siempre me fijaba en los bailarines que actuaban detrás de ellos…"
Muchas coincidimos en tener pocos referentes cuando éramos niñas, salvo nuestro entorno: familia, profesoras... ¿Tenías alguien que te inspirase cuando eras niña? Y a nivel profesional, ¿admirabas a alguien?
La verdad es que no tenía a nadie en mi entorno del mundo de la danza y en mi familia tampoco se habían acercado nunca al mundo de las artes. De pequeña me encantaba imitar a cantantes y siempre me fijaba en los bailarines que actuaban detrás de ellos…jajjaja
¿Cuando supiste o te diste cuenta que el baile no era solo un hobby, sino que te querías dedicar a él profesionalmente?
Cuando terminaba el instituto, ya tocaba elegir a que te ibas a dedicar y no encontraba nada que me interesara porque a mi me gustaba bailar. Pude ver que era posible dedicarse a ello y así lo hice.
No es solo baile, sino también interpretación. ¿Qué te gusta más de cada mundo?
Adoro la interpretación. Estuve recibiendo clases de teatro un tiempo y me pareció maravilloso, una especie de terapia para el alma en la que haces un trabajo interior muy importante. En la danza me encanta hacer papeles de argumento porque te llevan más allá.
A veces bailas coreografías sin argumento que están muy bien pero siempre me gusta que haya algo más que contar.
Inma Salomón junto a sus compañeros en la obra "Afanador" en el Teatro Real de Madrid
"En Electra tuve que hacer el papel protagonista con todo el peso de la obra y eso hizo que salieran cosas de mi que ni me imaginaba"
Inma Salomón en la obra "Electra"
Has interpretado a muchas protagonistas diferentes, ¿cuál te hizo sentirte más tú, que conectaras directamente con el personaje?
Sin duda, Electra. Fue un descubrimiento profesional y personal para mí. Fue un antes y un después en mi artista y en mi persona. Tuve que hacer el papel protagonista en una obra de argumento con todo el peso de la obra y eso hizo que salieran cosas de mi que ni me imaginaba. Estoy muy agradecida por ese momento de mi vida.
Nos llama la atención tu trabajo precisamente también en esta obra homónima de Antonio Ruz y Olga Pericet, Electra. En esta se mezclan estilos. ¿Qué te gusta más, lo clásico o lo contemporáneo?
Tengo que decir que las dos cosas me parecen interesantes pero inevitablemente me tira más lo contemporáneo, el introducir cosas nuevas en mi vida que no conocía, investigar y nutrirme de lo que no sé, me apasiona. Lo encuentro más libre, una puerta abierta a lo que no se sabe, fluir de una forma más orgánica que lo estrictamente estipulado.
Quedándonos en esta última pregunta, dominas diferentes estilos, entre ellos, muchos de danza española. ¿Qué estilo te identifica más?
Dentro de la danza española siempre me he identificado más con la danza estilizada, de hecho sigue siendo así, pero mucho más mezclada y contemporaneizada, aunque disfruto también mucho de bailar piezas emblemáticas ya que tengo la fortuna de trabajar en el Ballet Nacional de España y es el lugar idóneo para ello. Me siento muy afortunada de poder trabajar en tan diferentes estilos y no encasillarme.
"Es muy gratificante ver como tú trabajo llega a los corazones de la gente cuando actúas en el extrajero.
Valoran mucho la cultura y arte españoles."
También hemos visto que has viajado a destinos como Nueva York o Miami representando el programa Invocación. ¿Alguna anécdota que puedas contarnos?
Si, de hecho acabo de volver de allí, una gira maravillosa que nos ha dado experiencias increíbles. La verdad que una de las cosas más curiosas que me traigo de allí son los aplausos del público. Era increíble cómo estaban de entusiasmados, como si estuvieran en un concierto, cada vez que saludábamos era como si una super estrella saliera al escenario. Es muy gratificante ver como tú trabajo llega a los corazones de la gente de esa manera. He de decir que esto ocurre mucho más en el extranjero que en España, la cultura y arte españoles se valoran mucho más fuera que aquí.
Inma Salomón en el Concert Hall Vatroslav Lisinski
Inma Salomón en el Concert Hall Vatroslav Lisinski
Hablando del sector que en esta ocasión queremos visibilizar que es la danza, ¿piensas que se reconoce todo el trabajo que hay detrás?
La danza es, como decimos, la hermana pobre de todas las artes, es un sector muy precario en el que los sueldos son muy bajos y nuestra vida laboral muy corta. Estudiamos muchos años, son 10 años de carrera en el conservatorio profesional de danza, bastante sacrificados al tener que compaginarlos con los estudios , de hecho 6 de ellos los compaginas con el instituto y su correspondiente selectividad, etc… más tener vida, eres joven, quieres quedar con tus amigos…etc… el esfuerzo es tremendo y sin embargo no se valora ni se remunera dignamente. Además como ya he dicho es una carrera corta a la que más o menos a una edad temprana tienes que dejar de dedicarte profesionalmente a ello.
Cada temporada damos a conocer a mujeres que destacan en diferentes áreas a través de estas entrevistas. Si tuvieras que dar un consejo a esa niña que te admira y le encantaría ser como tú, ¿Qué consejo le darías?
(Uff Qué responsabilidad eso de dar consejos…jajaj)
Yo le diría que es un mundo difícil, que trabaje duro pero que nunca deje de ser ella, que siempre se tenga en cuenta y no intente ser quien no es para gustar. La luz natural y la personalidad hacen mucho a la hora de bailar y tener una buena presencia escénica, pero también en lo personal, en trabajos tan vocacionales no hay que perder el centro de uno mismo, es fácil alejarse de él.
Inma Salomón con las botas Jandra marrón vintage de Bryan Stepwise
¡Y para terminar, una ronda de preguntas rápidas!
Si tuvieras que describir en una palabra la sensación que sientes al bailar ¿cuál sería?
Libertad.
Sueño por cumplir.
Algún papel que siempre he admirado y que me encantaría interpretar como por ejemplo “Medea”.
¿Nos recomiendas alguna compañera de baile que debamos conocer sí o sí?
Mi amiga Patricia Guerrero, un ejemplo de artista que desde muy joven dirige su propia compañía y ha llegado a ser directora del Ballet Flamenco de Andalucia.
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